jueves, 17 de julio de 2008

Jóvenes españoles descubren un nuevo rostro de la Iglesia en Sydney

En la predicación de sus cardenales y obispos


SYDNEY, jueves, 17 julio 2008 (ZENIT.org).- Muchos jóvenes españoles, habituados a las constantes críticas de los medios de comunicación a los obispos e incluso a la experiencia religiosa, están descubriendo un nuevo rostro de la Iglesia: una Iglesia que abre los brazos y tiende puentes.

Un momento único para los chicos y chicas para tomar contacto en primera persona con sus obispos son las catequesis que están teniendo lugar en tres de las mañanas de estos priemros días de las Jornadas Mundiales de la Juventud.

Este jueves se celebró la segunda catequesis en la que los obispos han hablado sobre el tema "El Espíritu Santo, alma de la Iglesia". Diez cardenales y obispos españoles han dirigido la palabra a los muchachos divididos en grupos.

El mensaje es decisivo, comenta la Oficina de Información de la Conferencia Episcopal Española, pues "hoy muchos jóvenes son atraídos por Cristo y el mensaje del Evangelio, pero les cuesta reconocer que Él está presente en la Iglesia y que actúa a través de ella; de aquí la importancia, han señalado en las catequesis los obispos, de profundizar su relación con la Iglesia, Cuerpo de Cristo y misterio de comunión".

En la parroquia de St. Michael Daceyville, el arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia, cardenal Antonio María Rouco Varela, ha afirmado que "la vida de cada ser humano es un proyecto para la eternidad y no para la muerte".

Al referirse a la Iglesia ha dicho que "es de Cristo, no nuestra" y que "no ha nacido como nace un club social, sino que ha nacido de Dios".

Al igual que en la catequesis de este miércoles, el cardenal de Madrid ha hecho constantes referencias a la vida de los santos, en especial, dada la presencia de muchos jóvenes latinoamericanos, ha glosado la figura de san Juan Diego, quien recibió las apariciones de la Virgen de Guadalupe en México.

"Al final --ha señalado el cardenal--, se nos olvidarán los nombres de los jugadores de la selección española de fútbol que han ganado la Eurocopa 2008, pero la vida de los santos permanece".

En la sala principal de conciertos del Opera House de Sydney, el arzobispo de Toledo y primado de España, cardenal Cañizares Llovera, ha señalado que "el mundo de hoy necesita el testimonio de la Iglesia. Cristo no es un personaje del pasado; vive y está presente en nuestras vidas por la acción del Espíritu. No es posible amar a Cristo sin amar a la Iglesia".

El cardenal de Toledo ha presentado a la Iglesia como el eje de la vida de los santos y ha afirmado que la Iglesia "ha de tender puentes a todos los hombres y ser un espacio de comunión hacia una nueva humanidad".
Por ultimo, el arzobispo de Barcelona, cardenal Martínez Sistach, en la parroquia St. Francis Xavier Lavender Bay, ha explicado cómo la iglesia evangeliza "en el Espíritu".

"Toda la comunidad cristiana --apunta el cardenal Sistach-- tiene que inspirarse para su misión en la alegría que el Espíritu Santo infunde en los corazones de los creyentes".

Por ello, ha subrayado que "la Iglesia no puede descuidar su misión de dar a conocer a todas las gentes el gran bien que es el conocimiento del verdadero rostro de dios y la amistad con Jesucristo. Es el deber de la evangelización. La Iglesia debe, por tanto, evangelizar y también reevangelizar un mundo, muchas veces, descristianizado y secularizado".


Luego, en el mismo lugar de las catequesis, los obispos compartieron el almuerzo con los peregrinos. Posteriormente, se dirigieron hacia el muelle de Barangaroo para dar la bienvenida a Benedicto XVI.

Los tres cardenales españoles presentes en Sydney tuvieron la oportunidad de acompañar a Benedicto XVI en su travesía en barco por la Bahía de Sydney.

No hay comentarios.: