1.3 Espiritualidad Bíblica (1era. de 2 sesiones) INTRODUCCIÓN Normalmente, un libro se lee comenzando por la primera página y terminando por la última. Se puede, pero no es así como conviene leer la Biblia. Recordemos que más que un "libro" es una "biblioteca". Y una biblioteca no se lee del primer al último libro de cada uno de los estantes. En la siguiente sesión, como anexo, se presenta un posible "orden de lectura" del Nuevo Testamento. Recordemos que estudiar la Biblia no es solo leerla. Nunca se insistirá bastante en que hay que acercarse a la Sagrada Escritura con espíritu de fe. Y la fe es un don de Dios que es necesario implorar constantemente. De ahí que la oración deba habitualmente acompañar la lectura de la Biblia. Así se entabla el diálogo entre Dios y el hombre. "A Él le hablamos cuando oramos, y a Él lo escuchamos cuando leemos su Palabra", afirmaba en el siglo IV el gran obispo San Ambrosio. Sólo el Espíritu de Dios, que está y permanece en nosotros, puede darnos la luz interior que nos permite penetrar en el sentido de los textos bíblicos. De otra manera no podríamos comprender debidamente lo que Dios quiere decirnos. San Juan nos transmite las palabras de Jesús en su Evangelio (Jn 15, 26-27) "El Espíritu Santo, que el Padre enviará en mi Nombre les enseñará todo y los introducirá en toda la verdad". Lo que viene del Espíritu sólo se entiende plenamente mediante la acción del Espíritu, decía un escritor cristiano del siglo III. Sin el Espíritu, la Palabra escrita resulta letra muerta. a) LOS GÉNEROS LITERARIOS Varias son las lenguas en que la Biblia fue originalmente escrita; la mayor parte del Antiguo Testamento se encuentra escrito en hebreo y algunos pocos libros en arameo y griego. Pero para poder traducir el mensaje de la palabra de Dios es necesario no sólo conocer su lengua original, sino también conocer la manera en la que fueron escritos. A este modo de escribir y utilizar un lenguaje en particular para expresar una idea se le llama: Géneros literarios. Por ejemplo, un accidente automovilístico es narrado en diferente manera por la policía, el chofer y el periodista. Siendo el mismo acontecimiento es visto de diferente forma por distintas personas. Así, para decirnos Jesús que es el único medidor entre Dios y los hombres, expresa que Él es la puerta (Jn 10, 9a), el Camino (Jn 14, 6a), etc. Jesús, ciertamente no es ninguna puerta o camino en el sentido textual, sino que tiene la misma función que esa puerta o ese camino, si queremos llegar a Dios. Ya que estamos en el interior de la Biblia, se trata de saber interpretar no sólo sus palabras, sino hasta sus gestos y su silencio, que como en la música tiene un significado. Comprender lo que la Biblia nos quiere decir, más que lo que la Biblia nos dice. La lectura de la Biblia se asemeja a un témpano de hielo en el océano: sobresale sólo una décima parte, mientras que nueve décimas partes permanecen ocultas para quien no las profundiza. Se trata de aprender a descubrir con el corazón lo que NO es visible para los ojos. Poco a poco, con el estudio y la práctica, se va aprendiendo a conocer las distintas maneras de expresarse. Sobre todo se debe tener en cuenta que la Biblia utiliza mucho el lenguaje simbólico, por ser más expresivo, rico y universal. Entre los géneros literarios utilizados por los autores de la Biblia enunciaremos sólo los más sencillos y comunes: -Histórico: Narra acontecimientos de la vida del pueblo escogido y las intervenciones divinas a lo largo de la historia. -Poético: Expresión bella, armónica y musical de los sentimientos del alma del pueblo de Dios. -Midrash: A través de símbolos clásicos y tradicionales se expresa un mensaje. -Didáctico: Utilizado para transmitir una enseñanza doctrinal o moral. -Profético: Transmite los oráculos de los profetas. -Novela Histórica: A través de "acontecimientos artificiales" se transmiten mensajes importantes. Por ejemplo: Tobías, Ruth, Judith, Jonás, Esther. -Epopeya: Engrandece la figura de los héroes para estimular el valor y la esperanza del pueblo. Por ejemplo: Josué y Jueces. -Epistolar: Cartas de los apóstoles a las diferentes comunidades. -Apocalíptico: A través de símbolos se transmite un mensaje. -Parábola: Pretende transmitir una enseñanza a través de situaciones análogas a la presentada, usando personas, animales u objetos para ilustrar la misma. b) LA INTERPRETACIÓN En toda presentación de la Biblia se debe tratar de cómo interpretarla. Pero, el tema es tan amplio que ocupa un apartado por sí mismo (CIC 824-826; 112-118). Sin embargo, no queremos dejar de enunciar los tres elementos fundamentales de una sana interpretación de un texto bíblico: Buscar el sentido: qué fue lo que realmente los autores quisieron decir, sin hacerlos decir lo que nosotros queremos escuchar. Hacer un estudio del sentido literal: Textual: Descubrir el texto más original. Literario: Definiendo el género literario, descubriendo las fuentes que usó el autor, encuadrando el texto en le contexto, comparar con lo que otros textos se habla del mismo tema, etc. Histórico: Indagando la circunstancias sociales, políticas, en que dicho texto o libro nació; la personalidad, la vida y cultura del autor; la fecha en que se escribió, etc. Hacer un estudio del sentido espiritual: Alegórico: Podemos adquirir una comprensión más profunda de los acontecimientos reconociendo su significación en Cristo. Moral: Los acontecimientos narrados en la Escritura pueden conducirnos a un obrar más justo; ya que fueron escritos para nuestra instrucción. (1 Cor 10, 11). Anagógico: Podemos ver realidades y acontecimientos en su significación eterna, que nos conducen hacia nuestra patria. Así, la Iglesia en la tierra es signo de la Jerusalén celeste. Trabajo para casa 1. Trata de ubicar los siguientes textos en un género literario en particular de los ya mencionados: a) 8 ¡La voz de mi amado! Helo aquí que ya viene, saltando por los montes, brincando por los collados. 9 Semejante es mi amado a una gacela, o un joven cervatillo. Vedle ya que se para detrás de nuestra cerca, mira por las ventanas, atisba por las rejas. 10 Empieza a hablar mi amado, y me dice: «Levántate, amada mía, hermosa mía, y vente. Cantar de los cantares 2, 8-10 b) «El Reino de los Cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer y la metió en tres medidas de harina, hasta que fermentó todo.» Mt 13, 33 c) 13 Os saluda la que está en Babilonia, elegida como vosotros, así como mi hijo Marcos. 14 Saludaos unos a otros con el beso de amor. Paz a todos los que estáis en Cristo. 1 Pe 5, 13-14 d) 1 Después tuve una visión. He aquí que una puerta estaba abierta en el cielo, y aquella voz que había oído antes, como voz de trompeta que hablara conmigo, me decía: «Sube acá, que te voy a enseñar lo que ha de suceder después». Ap 4, 1 2. Busca en el Catecismo de la Iglesia Católica los siguientes números que te pedíamos consultaras en el subtema de la "Interpretación": 824-826; 112-118 (Puedes buscar el CIC en nuestra biblioteca). 3. Puedes empezar a leer también LA INTERPRETACIÓN DE LA BIBLIA EN LA IGLESIA de la Pontificia Comisión Bíblica. Disponible también en nuestra biblioteca. |
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